Los días 23 y 24 de diciembre CESAL, el Ayuntamiento de Madrid, Fundación La Caixa y Caixabank repartirán 20.000 menús solidarios para personas vulnerables en el marco del proyecto 'Comedores con alma'. Más de 500 cocineros, ayudantes de sala y personas voluntarias han elaborado y preparado estos menús navideños destinados a 45 comedores sociales de la región.
En una acción solidaria sin precedentes, más de 500 personas voluntarias han participado en la elaboración y distribución de estos menús navideños a lo largo de 3 semanas, con la cesión del restaurante El Mirador de Cuatro Vientos para la cuestión del cocinado, emplatado y logística de la actividad.
Las personas que recibirán este menú de Nochebuena son usuarios habituales de los comedores sociales que forman parte de la iniciativa Comedores con alma que, desde su origen en el año 2014, ha pretendido ser mucho más que un programa de ayudas económicas, logrando convertirse en un espacio de encuentro para los diferentes comedores sociales con los que CaixaBank y Fundación La Caixa colaboran de forma muy activa.
El menú ha sido elaborado por jóvenes cocineros voluntarios formados por CESAL, muchos de ellos en situación de alta vulnerabilidad como las personas a quiénes llegarán los menús, que durante semanas han trabajado en las cocinas cedidas por el Mirador de Cuatro Vientos para la elaboración de los 20.000 menús, consistentes en un primer plato de ensaladilla de mariscos con mahonesa de cítricos, seguido por pollo campero en pepitoria de trufa con arroz chaufa, para finalizar con turrón en textura y dulce navideño.
Estos jóvenes que CESAL ha formado y que ahora apoyan en iniciativas como Comedores con Alma, han sido, junto con las personas voluntarias de todos los puntos de la Comunidad de Madrid la esencia de esta iniciativa.
Chema de Isidro responsable de cocina de CESAL explica que hemos estado semanas haciendo una media 1.500 menús al día que después se congelan con nuestro alumnado, jóvenes en riesgo de exclusión social a los que se les ayuda a encontrar una salida al mercado laboral. “No les enseñamos a cocinar, les enseñamos a trabajar, hay restaurantes que solo quieren chavales nuestros. Desde el primer día que llegan les damos el cuchillo y a cortar".
Raúl Jiménez, responsable de acción social de CESAL nos cuenta que en abril nos vimos obligados a cocinar para responder a la precariedad derivada de la crisis del coronavirus, algo que no habíamos hecho anteriormente y que nos ha servido para combinar esa necesidad con la formación de los alumnos. “Nosotros creemos en la dinámica de maestro y aprendiz. Se necesita un maestro que ame lo que hace, que tenga pasión por el trabajo y sepa el oficio. Es importante que conozca las necesidades de la empresa para que cuando los chicos lleguen al restaurante vean a lo que se enfrentan y sientan que son capaces de hacer las cosas”, apunta.
Pablo Llano, Director General de CESAL, ha puesto de relieve la necesidad de impulsar iniciativas como esta “para acompañar a las familias más afectadas por esta crisis. En este sentido, desde el inicio de la pandemia son muchas las personas que han solicitado nuestra ayuda y con las que hemos estado para superar juntos estos duros momentos, no sólo con ayuda material sino también con una relación personal a la que acudir”.
Hoy todo este esfuerzo se plasmará con la entrega en 45 comedores sociales de 20.000 menús. Cada uno de ellos llegará al hogar de una persona que podrá celebrar esta Navidad con un menú solidario muy especial.
Os compartimos diferentes imágenes con lo que ha sido este gran movimiento solidario de generosidad.
