El rebrote de la pandemia, 16 meses después del primer confinamiento, hace que muchas personas sigan teniendo dificultades a diario para cubrir sus necesidades más básicas. En CESAL, apostamos por impulsar la inserción sociolaboral de personas vulnerables, la mayoría jóvenes.
Nacieron en nuestro país o proceden de terceros países, pero todos comparten su vulnerabilidad social, proceden de entornos complejos o cuentan con un bajo nivel de estudios. Su realidad les impone grandes restricciones a la hora de encontrar un empleo y, en consecuencia, dificulta su integración en nuestra sociedad. Pero siguen trabajando con ilusión y así lo transmiten a quienes tienen la oportunidad de compartir un día con ellos.
Compartimos contigo su estusiasmo en este vídeo ⇓
Según el INE, en nuestro país, la pobreza severa creció un 7% el año pasado y afecta a 3,3 millones de personas. Por su parte, un nivel bajo de estudios incrementa el riesgo de pobreza y de exclusión hasta un 36%. Si, además, se toma en consideración la nacionalidad, el riesgo se eleva hasta un 58% para personas procedentes de países fuera de la Unión Europea. (Encuesta de condiciones de vida del INE, publicado 15/07/2021)